1.3.11

Marzo, bienvenido

1 comentario:

Anónimo dijo...

Quisiera envenenar a esos insaciables pececitos.
Envenenarlos con palabras.
Envenenarlos con mi sonrisa alucinada.
Envenenarlos con hojas de fresnos.
Envenenarlos con mi torpeza.
Envenenarlos dandoles un parissiene.
Envenenarlos haciendolos escuchar Porco.
Y entregarme a GreenPeace. Amén.